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Leyenda Turca
La leyenda cuenta que una tribu turca, que habitaba una zona situada al Oeste de la actual China, fue arrasada por los soldados de una tribu rival. Murieron todos a excepción de un niño, que sería rescatado del hambre por una loba gris llamada Asena, quien lo protegerá y alimentará hasta que el niño se hace adulto, momento en el que ambos se unen sexualmente.
Al mismo tiempo que ésta unión se consume, sus enemigos descubren su historia y temerosos del que es el heredero de su linaje, deciden capturarlo y matarlo. Testigo del asesinato, Asena huye a las montañas y se refugia en una cueva donde dará a luz a 10 vástagos mitad lobo mitad hombre. Hombres mitológicos que se casarán con mujeres de la zona, haciendo que generación tras generación la población de nuevos turcos crezca, volviéndose un pueblo poderoso que se expande geográficamente ayudados con la fuerza de su genética animal. Este pueblo pasó a ser llamado Tu-Kiu, los primeros turcos.
Dicho pasado mitológico relacionado con el lobo es muy recurrente en la cultura turca, de hecho el lobo es usado como principal símbolo del nacionalista partido turco MHP, un partido muy extremista cuyos seguidores suelen realizar con su mano un gesto que homenajea a esa loba originaria, los más fieles incluso se dejan crecer un característico bigote que imita las orejas del lobo.
Dejando aparte la apropiación indebida de este partido extremista, el mito de Asena y la relación del pueblo turco con sus lobos es de aprecio y respeto, el lobo representaba el honor y es recurrente en las leyendas y en la simbología, de hecho se dice que fue un lobo quien dirigió a los turcos al mitológico valle de Ergenekon, migración que luego daría a este pueblo la llave de la entrada a Anatolia.
Cada año, se ofrecían sacrificios en la gruta en la que la loba habría dado a luz a los antepasados, lo que nos recuerda a las lupercales romanas, y al igual que entre los romanos, entre los turcos el lobo es un símbolo propiciatorio de fecundidad. En Anatolia, aún se ve a las mujeres estériles invocar al lobo para tener hijos. En Kamchatka, en la fiesta anual de octubre, se fabrica una imagen del lobo en heno y se conserva un año con el fin de que despose a las jóvenes de la aldea.
Niños criados por lobos
La primera mención histórica de un niño lobo nos llega gracias a Camerarius, en 1602, retomada por Rousseau en 1754: se trata de un niño lobo de la región de Hesse, descubierto en 1344. Los lobos lo habrían llevado a un lugar tapizado de hojas y lo habrían rodeado de noche para protegerlo del frío. En el año 1344, otro niño lobo fue encontrado en el bosque de Hart, en Baviera: el niño lobo de Wetteravie.
Más niños animales aparecieron en esa época, niños cordero, niños oso, niños vaca, niños leopardo, niños gacela y niños cerdo. Llegaron incluso a ser clasificados por Linné como Homo ferus, hombre errante o salvaje. Malson (1964) menciona 52 casos de niños salvajes de 1344 hasta la década de 1960, que fueron por lo general recogidos por animales, de los cuales un 10% habrían sido criados por lobos. Todos estos niños fueron agrupados como niños lobo porque se creía que habían sido criados por animales salvajes, pero sobre todo porque se comportaban como lobos salvajes ante la mirada atenta de los observadores.
Una de las historias mas famosas de niñas criadas por animales es la de Amala y Kamala.
El 24 de Septiembre de 1920, durante una de sus expediciones, el reverendo Sigh se detuvo en el pueblo de Godamuri, a 120 km al suroeste de Calcuta, para pasar la noche en un establo. Aterrorizado, su anfitrión le habló de la presencia de una criatura monstruosa en la jungla vecina, el Manush-Bagha (espíritu humano). El reverendo quiso ver el monstruo, pero sin éxito. Volvió al lugar el 8 de octubre de 1920. Al día siguiente, al acabar la tarde, mientras estaba al acecho, vio dos criaturas que salían de la guarida de una loba, que las precedía con sus dos lobeznos. El 17 de octubre del mismo año, estas dos criaturas, junto con los lobeznos, fueron capturadas en la madriguera. Para ello hubo que matar a la loba que intentó defenderse. A título provisional, el reverendo Sigh confió las dos niñas a su hospedador. No obstante, la presencia de estos “monstruos” engendró el pánico en los aldeanos, que abandonaron el lugar. Algunos días más tarde, el reverendo recuperó a las niñas en un estado lamentable y las llevó a su orfanato. Amala murió un año después, más o menos a los dos años y medio de edad. Kamala vivió nueve años. Las dos murieron de uremia, un problema renal.
Fotografía de Kamala y Amala real.
El comportamiento social del lobo es complejo y le permite adoptar niños en ciertas condiciones. Es muy probable que estos niños adoptados adquieran un estatus jerárquico de lobeznos (lobos pequeños), lo que les protege de posibles represiones por parte de los adultos.
Y si miramos las exigencias fisiológicas, la leche de la loba es muy nutritiva y los lobos tienen la costumbre de regurgitar la carne pre-digerida para su prole. Es también posible que si los bebés maman de la loba, ésta siga produciendo leche más allá de los tiempos habituales. Además, en la India, donde se han registrado más casos de niños lobo, los lobos permanecen en la madriguera durante más tiempo que en nuestras latitudes, hasta los 6 meses. El clima benigno aumenta así las posibilidades de supervivencia de los pequeños.
Crop-Circle de Avebury en Inglaterra, del 22 de Julio de 2008.
http://valdeandemagico.blogspot.com.es/2012/06/resuelto-el-misterio-de-creacion-de-los.html